En España, la Semana Santa es una de las tradiciones más importantes. En tiempos normales, miles de creyentes y turistas se reúnen para celebrar la resurrección de Cristo con las procesiones. También, se aprovecha para cocinar en familia.
Este año, las celebraciones de Pascua serán sin duda un poco diferentes. Las reuniones y eventos privados están severamente restringidos. Por ello, es de suma importancia que estas costumbres especiales de cocinar en y para la familia no se pierdan. Las delicias típicas mallorquinas para estas fechas son «Panades», «Crespelles» o «Rubiols».
Para que usted también pueda vivir las tradiciones de nuestra hermosa isla de Mallorca, a continuación, le hemos preparado la receta de «Panades»:
Ingredientes
Para la masa
- 1 kg harina
- 250 g manteca de cerdo
- 125 ml aceite
- 250 ml agua
- 3 yemas de huevo
Relleno
- Carne de cordero, pollo o cerdo
- Sobrasada
- Tocino
- Guisantes
- Pimentón dulce
- Pimienta
- Sal
- Aceite
Elaboración
- Especie los guisantes con aceite, pimienta, pimentón y sal.
- Mezcle todos los ingredientes para la masa menos la harina. La harina se irá añadiendo poco a poco hasta que consiga una textura homogénea y maleable.
- Coja 75 g de la masa y dele una forma de cesta con un diámetro de unos 10 cm y unos bordes de 3-4 cm.
- Rellene con unos guisantes en la parte honda, luego un poco de tocino, sobrasada y de carne y para finalizar, tápelo de guisantes.
- Coja una pequeña porción de la masa para hacer la tapa. Junte con los dedos ambas partes de la pasta de la forma que quiera para que quede bien cerrado y bonito.
- Hornee a 180º hasta que la pasta esté dorada (unos 50 minutos) y cuando se hayan enfriado, estarán listas para comer.
¡Saboree y disfrute de la maravillosa primavera y de la Semana Santa en Mallorca!
PD: En lugar de un relleno salado, también puedo imaginar una versión dulce con mermelada de naranja o (mi gran favorita) con mermelada de níspero. Hay que añadir un poco de azúcar a la masa. En este caso se desvía un poco de la receta tradicional….
Saludos cordiales, Anke Köhler